A una distancia de poco más de 650 años luz de la Tierra, una vieja estrella está muriendo: los científicos han hecho una nueva predicción del estado de Betelgeuse, basándose en su pulsación, y según sus cálculos, quedan literalmente algunas décadas. antes de que esta estrella explote.
Investigadores de la Universidad de Tohoku en Japón y la Universidad de Ginebra en Suiza reevaluaron las fluctuaciones de brillo de la estrella y concluyeron que, después de todo, probablemente representan la etapa final de su vida.
En general, pocas estrellas tienen su propia telenovela, que los científicos ven casi a diario. Betelgeuse se atenuó repentinamente en 2019 (el llamado Gran Evento Eclipse), pero en abril de este año el brillo normal de Betelgeuse alcanzó su punto máximo, brillando una vez y media más de lo normal. Una vez más hubo especulaciones sobre el destino del objeto, así como lo que significaron estos cambios.
La supergigante roja Betelgeuse nació hace 10 millones de años y es posible que se esté quedando sin combustible, por lo que los científicos están tratando de calcular cuándo la estrella terminará su vida. Los cálculos dependen de muchos factores. Uno de ellos es su tamaño real, que ha sido objeto de debate durante la mayor parte del siglo pasado. Las últimas mediciones muestran que es más compacta, por lo que es posible que la estrella viva decenas de miles de años antes de que se enfríe lo suficiente como para explotar.
Al igual que con muchas estrellas, sus capas exteriores pulsan en un equilibrio de compresiones y expansiones causadas por la dinámica interna de las presiones y la gravedad en competencia. Las fluctuaciones de brillo resultantes se repiten; en el caso de Betelgeuse, los dos períodos más destacados duran aproximadamente 2200 y 420 días.
Los científicos decidieron comprobar, y ¿qué pasa si hay más en el ciclo de 2200 días de lo que parece? Si la estrella comprimiera los núcleos atómicos en elementos ligeramente más grandes, como el carbono, podría tener un período de pulsación radial mucho más largo. Si bien los modos de haz de vida más corta harían que el radio de Betelgeuse fuera unas 800-900 veces mayor que el de nuestro Sol, el equipo demostró que un pulso más largo correspondería a un radio unas 1300 veces mayor. Los científicos concluyeron que las capas externas de Betelgeuse están retrocediendo mucho más porque su masa está concentrada en su núcleo, reciclando combustible a tal velocidad que sus motores podrían encenderse en décadas en lugar de milenios.
“También encontramos que la curva de luz sintética es cualitativamente consistente con la curva de luz de Betelgeuse hasta el Gran Eclipse. Concluimos que Betelgeuse se encuentra en las últimas etapas de la quema de carbono en su núcleo y es candidata para la próxima supernova galáctica”, dijo el estudio dice.
El documento aún no ha sido revisado por pares, pero la publicación preliminar de los cálculos y el razonamiento es suficiente para mantener cierto optimismo de que aún podamos observar una supernova con instrumentos modernos en nuestra vida. Si el modelo es correcto, podemos ver a Betelgeuse eclipsar brevemente a todas las demás estrellas poco después de 2050 antes de que desaparezca para siempre.
Aquí te dejamos una lista de noticias que de seguro vas a querer leer: